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El marxismo mismo

A ver, Señor Comandante Presidente (como muy maravillosamente lo dijeron los "libre pensadores" en el cuerpo 7 días de El Nacional), "Luz de mis Ojos". ¿Con qué otras teorías ha usted comparado el "marxismo", como para poder afirmar, durante la presentación de la memoria y cuenta del décimo primer año de su catastrófico gobierno, que es "la teoría más avanzada en la interpretación científica de la historia, de la realidad y es sin duda, la más avanzada propuesta hacia el mundo que Cristo vino a anunciar aquí en la Tierra"?
Explíquele usted al pueblo, a la parte del pueblo que no lo sigue, y a la parte del pueblo que todavía cree en usted, es decir, a todos los venezolanos, qué es el marxismo, según como usted lo entiende.
Los venezolanos que aún creen en usted, y que no están con su "revolución" por intereses particulares - económicos o de otra índole - entienden lo que usted entiende, y si usted no entiende, pues ellos tampoco, pero ahí están. "Como buenos soldados", sacrificándose y haciendo el ridículo por usted y por la "revolución" liderada por usted, y hundiéndose junto con el país bajo su desastroso liderazgo. Rodilla en tierra, pues.
Si su "marxismo" es compatible con el "bolivarianismo"o el "mirandismo" (por no nombrar el "cristianismo", sino quedarnos sólo con los "ismos" nacionales), entonces explíquele usted al pueblo de una vez por todas (es decir, por primera vez en 11 años) qué es exactamente lo que usted entiende por "bolivarianismo" y "mirandismo". O por lo menos explíqueselo a los intelectuales del Centro Internacional Miranda para que ellos traten de darle sentido y traten de explicárselo al pueblo venezolano.
Es ya evidente que el adjetivo "Bolivariana" que por voluntad suya, y no por voluntad constituyente, se le colocó a la República, y con el que ya había apellidado su "revolución", no tenía nada que ver con nuestro Libertador Simón Bolívar o lo que él haya podido escribir o pensar en el siglo XIX.
Ni con lo que pueda haber pensado o escrito Simón Rodríguez.
Ni siquiera con lo que pueda haber pensado o dicho Ezequiel Zamora.
Las tres raíces eran una farsa.
Eran una farsa para disfrazar su proyecto personal, utilizando los mitos históricos que nos han aglomerado como nación (y no sólo a nosotros, sino a otros hermanos americanos), para engañar al pueblo y, aprovechando su admirable capacidad para hablar güevonadas (y que se las crean), y la desgraciada incompetencia de la fauna política nacional, tomar poder absoluto de los recursos naturales y la poca riqueza que hemos podido construir durante nuestra historia como país.
¿Para qué?
Después de explicarle a los venezolanos qué entiende usted por marxismo, por favor explíquenos para qué está destruyendo el país.
¿Por qué no aprovechar esta gran oportunidad histórica que por cosas del destino usted ha tenido en sus manos para hacer de Venezuela un maravilloso lugar para vivir? ¿Por qué utilizarla para destruir lo que habíamos logrado en nuestros pocos siglos de historia, especialmente en el siglo XX?
Esa parte todavía no la entiendo.

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